La carne es una fuente importante de vitaminas y minerales, que debe estar incluida en toda dieta saludable en proporciones adecuadas.
Contrariamente a la creencia popular de primera línea, las carnes rojas no sólo son benéficas para nuestra salud, sino que son además casi indispensables por sus aportes nutricionales. El secreto está en moderar su consumo, y en alimentarnos con carnes en ciertas condiciones de calidad y cocción.
Entre las carnes rojas, la reina indiscutible es la de ternera, aunque también se incluye en este grupo a las carnes de cordero y algunas otras. La carne roja es una importante fuente de aporte nutricional de proteínas, completas con los aminoácidos necesarios para un correcto desarrollo y funcionamiento orgánico. También la carne roja es una fuente indispensable de vitaminas del grupo B (B 12), y de hierro, además de cobre, fósforo y zinc, nutrientes indispensables para el buen funcionamiento cognitivo y de los sistemas nervioso y defensivo de nuestro cuerpo.